Escoliosis degenerativa del adulto

¿Qué es la Escoliosis degenerativa del adulto?

Escoliosis degenerativa del adulto es una condición en la que la columna vertebral se curva lateralmente debido a la degeneración de los discos intervertebrales y las articulaciones facetarias a lo largo del tiempo. A menudo se presenta en personas mayores de 50 años y puede estar relacionada con la artritis y el desgaste natural de la columna.

Síntomas de la Escoliosis degenerativa del adulto

1. Dolor de espalda: Es el síntoma más común. El dolor suele ser crónico y localizado en la región lumbar.
2. Desbalance postural: La curvatura de la columna puede hacer que la persona se incline hacia un lado.
3. Rigidez: La columna puede volverse menos flexible debido al desgaste de las estructuras.
4. Debilidad muscular: Puede haber debilidad en las piernas debido a la compresión de los nervios.
5. Problemas neurológicos: En casos avanzados, la compresión de los nervios puede provocar entumecimiento, hormigueo o pérdida de sensibilidad en las extremidades inferiores.
6. Fatiga: Debido al esfuerzo adicional que hace el cuerpo para mantenerse equilibrado.

Diagnóstico

1. Historia clínica y examen físico: El médico realizará un examen físico y recopilará información sobre el dolor, los síntomas neurológicos y los antecedentes médicos.
2. Radiografías: Permiten ver la curvatura de la columna y evaluar su severidad.
3. Resonancia magnética (RM): Para obtener una visión detallada de los discos intervertebrales, las raíces nerviosas y los tejidos blandos.
4. Tomografía computarizada (TC): Útil para evaluar los cambios óseos en detalle.
5. Estudio de la marcha: Para analizar cómo afecta la escoliosis al equilibrio y la movilidad del paciente.

Tratamiento de la Escoliosis degenerativa del adulto

El tratamiento dependerá de la gravedad de los síntomas y la curvatura de la columna. Existen enfoques conservadores y quirúrgicos:

Tratamiento conservador

1. Medicamentos para el dolor: Analgésicos y antiinflamatorios no esteroides (AINEs) para aliviar el dolor.
2. Fisioterapia: Ejercicios para fortalecer los músculos de la espalda, mejorar la postura y la flexibilidad.
3. Inyecciones epidurales: Para aliviar el dolor en casos de compresión nerviosa.
4. Corsés: Aunque son más útiles en pacientes jóvenes, pueden ayudar a algunos adultos a reducir el dolor o mejorar el equilibrio.
5. Modificación de actividades: Evitar actividades que exacerban el dolor o la fatiga.

Tratamiento quirúrgico

Si los síntomas no mejoran con el tratamiento conservador y hay una progresión de la deformidad o compresión neurológica significativa, se puede considerar la cirugía:

1. Descompresión espinal: Se realiza para aliviar la presión sobre los nervios.
2. Fusión vertebral: Se utilizan injertos óseos y/o implantes para fusionar las vértebras y estabilizar la columna.
3. Corrección de la curva: En algunos casos, el cirujano también corregirá la curva espinal.

El objetivo del tratamiento es mejorar la calidad de vida, reducir el dolor y prevenir la progresión de la escoliosis.